Todo tiene un principio:

Que difícil es expresar todas las emociones que pasan por mi mente e invaden mi cuerpo, ya que estas no se pueden escribir, sólo se sienten y con un gran esfuerzo se expresan.

Como primer punto en mi itinerario tengo la novela "A orillas del río piedra me senté y lloré", que representa mi meta por encontrar el amor.

Antes de leer me senté en mi pieza y me puse a observar fijamente la portada del libro y a tratar de interpretar el título, sin tener conocimeintos previos de la lectura. Pretendo descubrir un amor sincero de parte de los protagonistas y que no tiene fronteras.

Pero, ya he comenzado mi lectura y debo decir que tengo un gustito amargo, ya que no puedo entender que la protagonista no sea capaz de expresar sinceramente su amor y de poder vencer sus miedos. Creo que ella ama al protagonista y no se atreve a declarar su amor.

En lo leído , siento que nosotros somos los responsables de vivir nuestra vida y de darle el curso que nos complazca.

En nuestra tarea diaria, está el vencer los miedos que muchas veces no nos dejan realizar cosas. Debemos probar cosas diferentes para así tener conocimeinto del mundo. Es así como construímos nuestra vida, a través del reto a los miedos que nos amenazan cotidianamente.

Un amor sin fronteras y que ha vencido al tiempo, es el que emana del protagonista hacia Pilar. El amor verdadero dura a lo largo del tiempo...

Con estas experiencias, a su vez, he relacionado mi vida, ya que pueden pasar muchas cosas que nos entristecen el día o nos opacan la vida, pero al fin lo que perdura es un amor verdadero... Es lo que siente el corazón lo que más valor tiene en este mundo materialista.

Estamos rodeados de cosas maravillosas que no sabemos apreciar y el estar sujetos a reglas nos pone una venda en nuestros ojos. Así no podemos valorar los cada fragmentos de sentimientos que nos quieren entregar, vivimos ciegos a las cosas buenas y absorbemos todo lo malo...